COMUNICADO DE PRENSA

 

LA CIDH ANUNCIA VISITA A VENEZUELA

 

Nº 21/02

 

El Presidente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Prof. Juan Méndez, presentó el Informe Anual de la CIDH ante la Comisión de Asuntos Jurídicos y Políticos de la Organización de los Estados Americanos y anunció la visita in loco a Venezuela por el pleno de la Comisión del 6 al 10 de mayo. Asimismo, recordó que la Asamblea extraordinaria de la OEA, recientemente celebrada, expresó su satisfacción de que la Comisión haya aceptado la invitación que el Presidente Hugo Chávez Frías le hiciera en septiembre de 1999.

 

Durante su presentación, el Presidente Méndez reiteró el beneplácito de la Comisión por el restablecimiento del orden constitucional y del gobierno democráticamente elegido del Presidente Chávez y recordó que ante el intento golpista, la Comisión Interamericana reaccionó públicamente y de inmediato, deplorando la destitución de las más altas autoridades de todos los poderes públicos y advirtiendo que dichos hechos configurarían los supuestos de interrupción del orden constitucional contemplados en la Carta Democrática.

 

Sobre la posición mantenida por la CIDH frente a los hechos ocurridos en Venezuela en recientes días, el Presidente Méndez negó enfáticamente que la CIDH hubiera actuado de manera “ambigua”. El Presidente de la CIDH precisó que la comunicación dirigida por el Secretario Ejecutivo el 13 de abril de 2002 a José Rodríguez Iturbe, quien fuera designado Canciller del gobierno de facto, solicitando información sobre la detención e incomunicación del Presidente Hugo Chávez Frías y medidas cautelares relacionadas con la libertad, integridad personal y garantías judiciales del señor Tarek William Saab, Presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Asamblea Nacional de Venezuela, no puede interpretarse como forma alguna de reconocimiento al régimen de facto. Y aclaró que  “conforme a su práctica y a la de otros órganos internacionales de derechos humanos, se dirigió a quienes el día 13 de abril de 2002 detentaban de facto la autoridad estatal en Venezuela, ya que el ejercicio de la autoridad, usurpada o no, conlleva la obligación de respetar y garantizar los derechos humanos”. El Presidente de la CIDH, explicó que “en múltiples ocasiones en el pasado la Comisión ha mantenido comunicaciones con gobiernos de facto en distintos países del hemisferio, a la par de condenar enérgica y categóricamente los quiebres institucionales”; y concluyó indicando que “no corresponde a la CIDH conforme a sus facultades convencionales o estatutarias reconocer a gobiernos sino proteger los derechos humanos de las personas y es lo que precisamente hizo en este caso”.

 

El Presidente Méndez valoró de manera positiva el reconocimiento expresado públicamente por el Presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Asamblea Nacional de Venezuela, Sr. Tarek William Saab, a las medidas de protección otorgadas por la Comisión en cumplimiento de su mandato.

 

          En cuanto a papel de los medios de comunicación, el Presidente Méndez indicó que el Relator Especial para la Libertad de Expresión le ha expresado su preocupación “por la falta de información en que se encontró la sociedad venezolana en los días de la crisis institucional, cuando precisamente el acceso a una información rápida es tan indispensable para la defensa de la democracia”. Asimismo señalo que la Relatoría y la Comisión esperan un proceso de reflexión de los medios de comunicación venezolanos acerca de su rol en tales momentos.

 

Finalmente, el Presidente Méndez advirtió que “la CIDH seguirá observando de manera muy atenta el desarrollo de la situación de los derechos humanos en Venezuela”. La visita que efectuará la Comisión la próxima semana constituye “una oportunidad para profundizar el diálogo que la Comisión mantiene con las autoridades y con la sociedad venezolana, a fin de contribuir al fortalecimiento de la defensa y protección de los derechos humanos en un contexto democrático y de legalidad institucional”, concluyó el Profesor Juan Méndez.  

 

 

 

Washington, D.C., 1º de mayo de 2002